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Aprende a preparar y conservar tus mermeladas favoritas
Miércoles, 6 de junio de 2018Llega la primavera y la sangre altera. Y llegan los albaricoques, las fresas y las cerezas y nos sabe a poco su delicioso y fresco sabor.
Para alargar los ricos sabores de las frutas de primavera hoy os enseñaremos a elaborar unas mermeladas riquísimas que podréis conservar y degustar durante varias semanas e incluso meses.
Elementos imprescindibles para toda mermelada
El azúcar es un elemento clave para la conservación de tu mermelada. Actúa como conservante natural, por lo que cuanto más azúcar incorporéis en la receta, más perdurará en el tiempo. Las proporciones de las recetas más clásicas serían de 50% azúcar y 50% de fruta. Sin embargo, mucha fruta ya lleva azúcares en su composición, por lo que una relación del 33% de azúcar y un 67% de fruta suele dar mermeladas muy ricas y compensadas a nivel dietético. Así pues, estaríamos hablando de incorporar la mitad del peso de la fruta en azúcar a nuestra receta. Hay que tener en cuenta que el peso de la fruta lo calcularemos siempre libre de huesos, hojas y cortezas.
Los mejores envases para conservar las propiedades de una mermelada son los tarros de vidrio con tapas de cierre hermético como las tapas de cierre de rosca o twist. Vigilar siempre que las tapas se mantengan siempre limpias y que los tarros de vidrio no presenten ninguna rotura ni golpe, pues si el cierre no fuese hermético no conseguiríamos una buena conservación de nuestra mermelada casera.
Métodos de conservación
Recordar que además del uso del azúcar como conservante, recomendamos esterilizar los tarros que usemos para la conservación de la mermelada. Para ello podemos usar dos métodos: crear el vacío mediante esterilización o pasteurización.
Para la esterilización, hervimos en agua durante 10 minutos el tarro y su tapa y lo dejamos secar al aire. Aprovechamos la alta temperatura de cuando hemos terminado de cocer la mermelada e incorporamos la mezcla en su tarro, que cerramos para que provoque el vacío en su interior. Ponlo boca abajo y déjalos reposar hasta que se enfríen por completo. Guárdalos en el frigorífico hasta que los vayas a usar. En cuanto lo abras deberás escuchar el pop característico de que el vacío se hizo correctamente. La duración máxima de conservación de la mermelada en el frigorífico tratada al vacío sería de unos 3 meses aproximadamente.
La pasteurización sería otro método de conservación que alarga la vida de tus mermeladas durante más tiempo en el frigorífico que la esterilización. Toma nota de todos sus pasos: coge una olla, coloca un paño en el fondo, introduce los tarros cerrados con mermelada y llénala de agua fría; calienta hasta que hierva (unos 20 minutos para mermeladas con alta proporción de azúcar o 30-45 minutos para mermeladas con baja concentración de azúcar); deja reposar en el agua hasta que el tarro esté templado; sácalo y déjalo boca abajo a temperatura ambiente; sabrás que se hizo el vacío correctamente cuando el tarro esté frío y notes la tapa ligeramente hundida.